Cómo demostró durante su participación en el reality y en sus intervenciones por distintos platós, Aída Nízar es sinónimo de bronca y polémica allá donde vaya. Su última aventura televisiva le ha llevado a Italia para participar en el Gran Hermano de allí, y acumula todo tipo de momentazos. Empecemos por una de las galas, donde tuvo un desencuentro con uno de los presentadores:
También ha tenido tiempo de coquetear con un atractivo compañero:
Y fue muy bien recibida por el resto:
¿Lo más divertido? Sus dificultades con el idioma:
Incluso se ha buscado un entrenador personal:
Pero, al final, ha terminado liándola: