Carmen le dice a Iñaki que sabe que está con Gotzone, pero se lo toma con filosofía, porque aunque le parece bien que rehaga su vida, no le gusta tanto que lo haga con ella, situación que la pone triste, por lo que sus amigas la sacan a bailar para que se despeje y, de paso, para que conozca a algún hombre nuevo. Desgraciadamente, Carmen ha perdido mucha práctica en esto de ligar.
Pero Iñaki todavía no se decide a sacar a la luz su nueva relación; algo complicado teniendo en cuenta que la cuadrilla no hace más que meterle en planes con ellos, lo que le obligará a poner excusas de lo más variopinto. Cuando Antxon le pide a la cuadrilla que le ayuden a reformar un piso que le han dejado en herencia, Iñaki se verá entre la espada y la pared.
Por su parte, Dolores está convencida de que Carmen la va a despedir, pero la nueva directora está dispuesta a perdonarla si trabaja como agente doble para ella: la va a utilizar para enterarse de todo lo que planea Trini. Mientras, Jozé regresa a Sevilla dispuesto a declararse a Irene, pero una vez allí descubrirá que su amor se ha echado novio.
