Esta semana, dos nuevas parejas al borde de la ruptura se apuntan a la terapia de Intercambio consentido: Roberto (49 años. Sanitario) y Óscar (39 años. Pescadero) llevan diez años juntos. Roberto sabe que es “insoportable”, pero está orgulloso de ello. Óscar demanda tranquilidad, sosiego y respeto a su familia.
A partir de ahora, compartirán sus vidas con Jesús (33 años. Actor y empresario) y Manuel (37 años. Pescadero y empresario). Jesús acusa a su pareja de ser “un coñazo de tío”, mientras que Manuel dice de su novio que es muy absorbente.
Para empezar a conocerse, Jesús y Roberto irán a una tienda de ropa interior masculina antes de salir de fiesta por Chueca. En cambio, Óscar llevará a Manuel a la Iglesia de San Antón para conocer la labor social del Padre Ángel, ya que el andaluz es muy devoto.
En el Intercambio 3, Rubén tendrá la oportunidad de resolver sus dudas conociendo en persona a Javier. Paloma y él crearán una estrategia para sacarle información y descubrir si realmente han cruzado la línea. Algo ocurrirá en este encuentro que provocará que, a su regreso a casa, Paloma se enfade con Rubén.
Para desconectar y limar asperezas, los coaches les propondrán un viaje romántico a Córdoba. Tras hacer las paces, Paloma revelará a Rubén un gran secreto. Javier y Lara pondrán rumbo a Málaga, donde ella cumplirá su sueño de vestirse de novia y contagiará a su compañero la ilusión de casarse.
En el Intercambio 1, Luis dejará de confiar en Nieves. Los problemas de comunicación entre ellos crecerán hasta tal punto que Nieves se saltará una de las normas básicas de la terapia y se negará a compartir más cosas con Luis. La convivencia llegará a su fin y los coaches evaluarán si están preparados para decidir sobre su futuro. Nieves mandará un mensaje a Eli, que le hará dudar sobre su futuro con Luis.
