Antena 3 estrenará próximamente en prime time El contenedor, adaptación de un formato danés, Stripped, con el que intenta hacer ver a los participantes si verdaderamente necesitan lo que tiene.

Los habitantes de cuatro vivencias (una familia de Alicante, una pareja de Sabadell, dos amigas malagueñas y tres compañeros de piso valencianos) tendrán que aprender a vivir con su rutina diaria, como ir al trabajo o al gimnasio, pero prescindiendo de cualquier elemento material, incluida su propia ropa. "Ha sido difícil encontrar a gente normal que quisiera enfrentarse a este reto", ha reconocido en el FesTVal Ana Rivas, directora de contenidos de Shine Iberia. "Todos buscaban saber quiénes eran realmente, porque hay habilidades que solo se descubren en situaciones extremas".

Durante 10 días deberán desenvolverse con normalidad en su casa, que habrá sido vaciada: no tendrán camas, cortinas ni sofás. Todas sus pertenencias serán almacenadas en un contenedor situado a un kilómetro de la vivienda. No podrán comprar nada, salvo la comida y la bebida del día.

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Podrán pedir ayuda para moverse, trasladarse o alimentarse, pero no podrán acumular nada. Cada miembro del grupo podrá recuperar un solo objeto al día. "Lo que peor han llevado ha sido dormir. Cuando duermes encima de una puerta, el móvil ya no te importa. Y nos hemos encontrado gestos de solidaridad muy grandes, sobre todo, como siempre, de los que menos tienen".

Estos son los partipantes:

Lidia (31 años, profesora y propietaria de una escuela de inglés) y Dani (40 años, empresario) son pareja y llevan año y medio viviendo juntos en Sabadell. Los dos se consuderan consumistas y creen que la felicidad es inviable sin los miles de objetos que les rodean, en concreto, 2.207. Quieren saber si son felices el uno con el otro en otro modelo de vida.

En Muchamiel (Alicante) viven los Izquierdo-Vicedo, una familia rodeada de comocidades. Maribel (45 años) y Julián (46 años) son propietarios de un negocio de estética. Consideran que les ha costado mucho conseguir todo lo que tienen y quieren darles una lección a sus hijos para que aprendan a valorar lo que tienen.

Marina (31 años, consultora inmobiliaria) y Desiré (35 años, dependiente) son dos amigas de Benalmádena. Buscan superarse y ver hasta donde son capaces de llegar.

Juanjo (27 años, profesor de danza), Raquel (19 años, estudiante universitario) y Sergio (18 años, estudiante de estética) comparten piso en Valencia y están acostumbrados a vivir rodeados de todo lo que creen necesitar: gafas, fundas de móvil, relojes...