Se aproxima el cierre de la Escuela de Fama a bailar, que este jueves vivirá la gran final. Antes de que llegue ese momento tan emocionante, hemos charlado con dos de las profesoras del programa de Movistar 0. Carla Cervantes y Sandra Egido, dos de las profesoras que han acompañado a los chicos y chicas durante todo el concurso, nos cuentan qué sensaciones tienes en esta cuenta atrás.
- ¿Cuál es vuestra labor en estos últimos días?
Ayudar a los chicos en los solos y elegir los nominados. Todos son muy trabajadores, les hemos visto crecer y luchar. Llegados a este punto, todo es muy complicado.
- A esta altura del programa, ¿creéis que depende un poco de vosotras el posible ganador?
Sandra. No, y no nos sentimos juzgadas por eso. Les hemos demostrado hasta dónde puede llegar cada uno y enseñar lo mejor de sí mismos. Ahora están más hechos. Nosotras solo les damos el último empujón y estaremos a su lado hasta el final.
Carla. Hasta ahora nuestro trabajo consiste en ayudarles y acompañarlos, para que el público tenga otra perspectiva, otras herramientas para valorarles en el aspecto artístico.
- Decidme alguien que os habría gustado que continuara y se ha quedado en el camino.
Sí (al unísono) Belén Leroux, la primera expulsada de la Escuela que ya forma parte del cuerpo de baile de la cantante británica Dua Lipa. Todos nos llevamos las manos a la cabeza. Era una de las finalistas y posible ganadora del programa. Fue un shock, tiene mucho potencial y nos dio mucha pena.
- ¿Es importante que ahora bailen solos?
Sí, sí, porque es la única manera de ver su potencial y sus propuestas. Pero puede pasar de todo. Estos días son muy decisivos.
- ¿Qué debe tener el ganador?
Carla. Para nosotras tiene que ser aquel que haya defendido semana tras semana su trabajo. Valoramos mucho la evolución.
Sandra. Que haya trabajado bien durante estos meses, y ahora que demuestre que merece ganar. Al principio, la gente estaba sorprendida con el nivel de los concursantes y pensaban que sería fácil que sacáramos de ellos más. A lo largo del programa, se ha visto que aún debían aprender y han superado las dificultades.
- ¿Preferís ganador o ganadora?
Carla. Nos da igual, pero si fuera ganadora nos encantaría. Además, en los casting nos encontramos con más chicos que chicas, y aunque estamos cada vez más equilibrados hemos tenido que lucharlo mucho, por eso si hay ganadora sería lo más.
- ¿Qué habéis aprendido del programa?
Carla. A trabajar en equipo y bajo presión, y en las coreografías, a sacar y resolver muy rápido, aportar herramientas muy distintas a alumnos diferentes, a los que les cuesta captar lo que dices. Hemos ampliado el lenguaje para que abarque todo lo que quieres decirles, y ellos encuentre esa línea que les ayuda a mejorar y asimilar lo que les estás enseñando. Hemos crecido como docentes y como coreógrafas.
Sandra. Esto nos va a servir mucho para nuestra carrera porque antes trabajábamos más despacio y con más perspectiva. Ponernos este reto con nuestras dudas y haberlo superado así, es muy reconfortante y nos empuja a seguir queriendo trabajar y a dar lo máximo de nosotras.
- ¿Fuera se habla más de baile de lo que pensabais?
Carla. Ya teníamos claro que en España hay mucho talento, pero se queda aquí, no se proyecta. Por eso nosotras hemos viajado en busca de oportunidades. Si tienes algo preciado y no se muestra ni se utiliza, no vale nada.
Sandra. El talento está, y hay mucha gente que baila. Debemos luchar por creer en ellos y animarles a salir. Así tendrán más posibilidades de seguir creciendo. En España hay que apostar más.
- ¿De qué os sentís más orgullosa de vuestro paso por Fama?
Sandra. Hemos tenido que ser duras y estrictas, pero hemos demostrado que se puede trabajar desde el amor y el respeto. Solo así se consiguen cosas increíbles y con eso nos quedamos.
- ¿Qué momento no olvidaréis de esta experiencia?
Sandra. Muchos, uno de ellos fue con las Clónicas. Les dimos material muy difícil y especial para nosotras y ver cómo lo superaban por encima de sus posibilidades, nos llenó.
Carla. Lo más bonito es cuando les planteas un reto que creen que no van a superar y te miran con esa cara de susto que pasa a ser de felicidad después. Esos momentos son mágicos.
- ¿Qué respuesta habéis recibido en la calle?
Sandra. La gente se nos acerque y nos salude. Además el mundo del baile en general ha recibido el programa muy bien; están de acuerdo en nuestra forma de trabajar.
Carla. Se hace raro que te miren por la calle pero se agradece muchísimo porque nos da fuerzas.
- ¿Repetiríais en otra edición?
Sí, sí, pero primero unas vacaciones.
- ¿Qué novedades introduciríais en una posible nueva entrega?
Carla. Es una propuesta que hicimos desde el principio: el cambio de pareja. Al final, el concurso no deja de ser una lucha individual y darle bombo a que exista una conexión no es efectivo. Quizá sea más fácil trabajar con otra persona, pero en la vida real cambias constante de pareja de baile.
Sandra. Nos gustaría poder dar más clases prácticas, de formación y entrenamiento más concreto. Es verdad que han tenido profesores de distintas modalidades, pero querríamos formarles durante más tiempo.
- ¿Contentas con los resultado del programa?
Carla. Teníamos mucho miedo porque no se apuesta así por la danza. El programa Fama ya había dejado de existir. Nosotras empezamos a bailar hace diez años, justo cuando emitieron el programa por primera vez. Es muy bonito ver cómo tantos años después servimos de referente e inspiración.
- ¿Os acompañará algún concursante de Fama? ¿Habéis pensado en alguien?
Carla. No podemos decir nada hasta que acabe el programa. Da igual que sea el ganador, tenemos claro que hay dos o tres personas que nos llevaríamos en el bolsillo. Hay muchas ganas de crear un espectáculo.
Sandra. Además tenemos ya varios cursos cerrados para el verano. En julio estaremos en Lleida, luego lo intentaremos en Madrid, Barcelona, Sevilla, Vigo, Jaén, Alicante…
¿Y hay posibilidad de una gira con los chicos de Fama?
¡Nos encantaría!, aunque no hay nada hablado. Todo es sorpresa.
