La vuelta a Madrid de Juana, cuatro años después, sorprendió a su ex en la ficción y a la propia actriz, Cristina Alcázar. “Siento que he vuelto al nido, en el que aprendí mucho”.
¡Con Juana ha llegado el conflicto!
Sí, por trabajo quiere llevar a su hijo al internado, a lo que Toni se opone. Y el jueves 20, su viaje a Upsala, Suecia, coincidiendo con el accidente de Chernóbil, llenará de inquietud a la familia.
¿Cuánto has estado de grabación?
¡Dos semanas que me han sabido a poco! Juana se despide con un final abierto, pues continúa amando a Toni. ¡Ojalá vuelva pronto!
¿Qué te gustaría tener de su personalidad?
Su serenidad, pero comparto las ganas de tirar hacia delante y su apego familiar. Lo de ser madre por ahora no.
¿Fuiste gimnasta?
Sí, de rítmica. Desde los 7 a los 14 años y entrenaba ocho horas diarias. Me hizo disciplinada. Ahora practico natación y hago aeroyoga.
¿Algún hobby más?
Limpiar la casa, ir al mercado, dar clases de interpretación, y producir teatro con La Ruta SL, que tenemos dos funciones en cartel y en una también actúo: Palabras encadenadas.
¿Qué te gusta del teatro?
En el escenario estoy en paz conmigo misma, pero el ritmo de la tele me vuelve loca. Me gustaría una comedia o algo histórico como El Ministerio del Tiempo.
Y hasta has dirigido un documental.
Piensa, observa y respira es mi forma de ayudar a Alfa, asociación con viviendas tuteladas para discapacitados.
