‘Descolocados’: Kathy Bates abre su ‘fumadero’ en Netflix

Con una carrera de casi 40 años, resulta difícil de creer que una actriz tan prestigiosa como Kathy Bates (Misery) no haya probado la comedia en televisión. Su única incursión en el género fue un episódico en Dos hombres y medio en 2012, que le valió un premio Emmy a Mejor Actriz Invitada. Las expectativas sobre su primer papel protagonista son altas.

La intérprete, que estos últimos años había sido una fija en la serie de terror American Horror Story, cambia de registro con Descolocados, la nueva sitcom de Netflix tras El rancho, con Ashton Kutcher, y Madres forzosas. Creada por Chuck Lorre (The Big Bang Theory), sigue el sueño de Ruth Whitefeather Feldman, una abogada defensora de la ‘hierba’ que, cuando es legalizada en Los Ángeles, se muda a la ciudad para cumplir su sueño: abrir su propia tienda de compra-venta de cannabis con su hijo Travis, de 20 años (Aaaron Morten), su amigo Carter (Toni Bell), guardia de seguridad, y Olivia (Elisabeth Alderfer), Dank (Chris Redd) y Jenny (Elisabeth Ho), sus tres dependientes budistas.

“Nunca me tomé en serio las comedias, pero he descubierto que es tremendamente difícil hacer reír”, dice la veterana actriz de 69 años, que reconoce que le gusta el humor de los hermanos Marx o el Gordo y el Flaco. “Estoy aprendiendo mucho de este proyecto. Me dijeron que si no era natural no iba a funcionar, y tenían razón. La comedia debe surgir de situaciones cotidianas y reales”.

En 20 capítulos de media hora, Kathy Bates se desenvuelve con espontaneidad y sin perjuicios, algo que lleva buscando desde que en 2012 superó un cáncer. “Fue un momento personal muy duro. Seguía amando mi profesión, pero estaba hundida”, confiesa la actriz, que ocultó la enfermedad por miedo a perder trabajo. Pero una compañera de profesión le dio argumentos para seguir adelante: “Recordé la vitalidad de Jessica Tandy en el rodaje de Tomates verdes fritos. Parecía que tenía 16 años en lugar de 84. Desde aquel momento decidí que queríaestar siempre enamorada de mi profesión y de la vida, y no permitir que nadie destruyera ese sentimiento. Y eso intento”.

EL ÉXITO LE LLEGÓ TARDE
Kathy Bates es uno de esos raros casos que se dan en Hollywood en los que la fama y el éxito llegan pasada la primera juventud. Actriz curtida en Broadway, no fue hasta 1990 cuando, a los 42 años, ganó el Oscar a la Mejor Actriz por su interpretación de la fría y malvada enfermera Annie de Misery, adaptación de la novela de Stephen King. Solo un año después protagonizó junto a Jessica Tandy Tomates verdes fritos, donde volvió a dar muestra de su talento al encarnar la transformación de Evelyn a lo largo de la película. Ahora, como otras grandes del cine, ha encontrado refugio en la televisión.