Nicole Kidman y las mujeres (realmente) desesperadas de HBO

Primavera de 2014. La productora Bruna Papandrea termina de leer Big Little Lies, best seller de la australiana Liane Moriarty, y cree que se puede hacer algo interesante con esta historia de secretos y mentiras protagonizada por cinco mujeres. Llama a su amiga Reese Witherspoon, que se encuentra en Nueva Orleans rodando Hot Pursuit. La actriz se lo lee en una noche y se pone en contacto con Nicole Kidman. “Me gustó que tratara la amistad entre personajes femeninos, que me fascinaron enseguida”, explicaba la actriz en la multitudinaria presentación en Los Ángeles de esta miniserie de siete episodios que HBO estrena el lunes 20.

Con dos estrellas de Hollywood en el proyecto, pocos profesionales podrían rechazar una oferta. Ficharon a David E. Kelley (Ally McBeal) para escribir el guión y Witherspoon conquistó a Jean-Marc Vallée, el director con quien optó al Oscar por Alma Salvaje. La producción se organizó rápidamente pero pronto se dieron cuenta de que una película no era la mejor alternativa. “La televisión abre un mundo nuevo de posibilidades –explica Nicole–. Los personajes necesitaban más tiempo y como ya había trabajado con HBO en la tv movie Hemingway y Gellhorn sabía que el proyecto crecería con ellos”.

El siguiente paso era elegir a las compañeras de reparto. “Fue todo bastante rápido. Reese llamó a su amiga Laura Dern (Jurassic Park) y Shailene Woodley (Divergente) se apuntó arrastrada por ella. Fue todo muy fácil”. La quinta actriz en sumarse sería Zöe Kravitz, hija de Lenny Kravitz, cantante con quien Kidman mantuvo una relación en 2014.

La miniserie está ambientada en la tranquila y exclusiva ciudad costera de Monterrey, en California, y en una comunidad donde nada es lo que parece. Celeste Wright (Nicole Kidman) es la mujer y madre perfecta, envidiada por su matrimonio con el joven Perry (Alexander Skarsgard), aunque de puertas para adentro todo son problemas. Su mejor amiga es Madeline Mackenzie (Reese Witherspoon), madre de dos hijos, con buenas intenciones pero con una energía explosiva que la lleva a querer ser el centro de atención de su círculo social.

Serán las únicas que acepten a Jane Chapman, (Shailene Woodley), una madre soltera con pocos recursos que sufrirá el rechazo de los vecinos, sobre todo de Renata Klein (Laura Dern), una poderosa abogada que se cree por encima de los demás.

La nota alternativa la pone Bonnie Carlson (Zoë Kravitz), profesora de yoga casada con Nathan (James Tupper), el exmarido de Madeline. Cuando aparece un cadáver en la fiesta de recaudación de fondos del colegio de sus hijos, la historia retrocede seis meses para desvelar los secretos y mentiras de esta apacible sociedad.

“Hemos trasladado la trama de la ciudad ficticia Pirriwee, en Australia, a Monterrey y los lectores se darán cuenta de que hemos dado más importancia a los maridos –explica Nicole–. Y quiero señalar que aunque se presta mucha atención a las mujeres, no existirían dinámicas de matrimonio ni de familia si no se incluyera a hombres fuertes también”.

Aunque la comparación con la famosa Mujeres desesperadas es obvia, el contexto y la trama sigue el camino opuesto. “No tengo nada contra esa serie, pero esta no es una comedia, sino la representación de mujeres atrapadas en el amor, la lealtad, la crueldad y los secretos de pareja –recalca la actriz australiana–. Llevo mucho tiempo queriendo hacer algo así y estoy muy orgullosa. Hay muchas mujeres en esa situación y quería ser sincera y honesta con ellas”.

Por deseo e imperativo de Reese Witherspoon y Nicole Kidman, buena parte del equipo técnico de la serie era femenino. “Durante 25 años he sido la única mujer en el set. Lo llaman el ‘síndrome de Pitufina’, porque estás rodeada de 25 pitufos y tú eres la única chica”, explica la protagonista de Una rubia muy legal. “Nuestra intención es que la audiencia entienda que también podemos hacerlo –añade Kidman–. Y, como me dijo una vez Stanley Kubrick, no hay que decirle al público qué debe sentir, sino hacer que lo sienta”.

Entre su extensa filmografía hay títulos vitales como Días de trueno, con la 
se dio a conocer 
o Los otros, del director Alejandro Amenábar. Logró la nominación al Oscar con Moulin Rouge! y puede llevarse con el drama Lion una nueva estatuilla.


Luego se especializó en rentables comedias románticas hasta que en 2014 produjo Perdida, de David Fincher, y protagonizó Alma Salvaje, con la que optó de nuevo 
al Oscar. Ahora prepara la tercera entrega de la película que 
la hizo famosa.

En 2011 protagonizó junto a George Clooney Los descendientes, de Alexander Payne. La saga Divergente, basada en los libros de Veronica Roth, 
la convirtió en ídolo juvenil y con 
la historia de una adolescente con cáncer de pulmón en Bajo la misma estrella, adaptación de la novela 
de John Green, demostró ser una actriz prometedora.


Se hizo mundialmente conocida gracias a Parque Jurásico. Tras 
un tiempo alejada de los focos, Laura Dern vuelve a escena con 
la serie Big Little Lies y también 
estará en la nueva de Star Wars.

Tras una pausa para centrarse en su grupo de música Elevator Fight, Zoë Kravitz encadena un éxito tras otro como Batman: la Lego Película y Mad Max: Furia en 
la carretera. Su próximo proyecto 
será la segunda entrega de Animales fantásticos y dónde encontrarlos, el exitoso spin-off de Harry Potter en la que será la novia del protagonista.