Buscadores del mejor escenario en televisión
Estos directores de arte, observadores natos, idean los decorados de las series y eligen los exteriores, cada vez con mayor protagonismo en las historias.
Mercedes Canales: "Rodar en exteriores engrandece una serie"
Era secretaria y, cuando la iban a hacer fija, Mercedes Canales reculó y retomó su interés por la decoración. Estudió Diseño de Interiores en Londres y Madrid; fue ayudante del gran Carlos Dorremochea, hasta su debut como Directora de Arte en La chica de ayer. Hoy firma Presunto culpable, La verdad y Allí abajo.
¿Qué proceso sigues?
A partir del guion y en función del perfil del personaje, diseño su casa, elijo mobiliario y decoración… En series como Presunto…, los exteriores marcan; no empecé a dibujar hasta que no tuve localizaciones.
¿Cómo las elegiste?
Con fotos hechas por localizadores de la zona; y tras una primera criba, las decidí ya sobre el terreno.
¡Ya son un personaje más!
Los exteriores engrandecen las series. Allá donde pongas la cámara, tienes un paisaje alucinante; los actores se meten mucho en el papel, y la gente de fuera se vuelca. Pasó en Santander y en el pueblo de Mundaka. ¡El Ayuntamiento nos dejó pintar el edificio de la Ertzaintza!
¿Cómo se ruedan?
Unas se hacen completas fuera, como La verdad, con medio año en Santander; en Presunto, los interiores del pueblo al norte de Vizcaya se construyen en plató con atrezzo regional. Me gusta hacer casas de verdad, no de revista; creíbles y con personalidad. Evito tirar de Ikea.
¿Rodar fuera encarece?
Claro, por eso se reducen los tiempos. Y en interiores Wallapop nos salva por rapidez y precio.
¿Madrid está ‘manido’?
Sí, en ciertas zonas solo permiten un rodaje al mes; y no más de tres días en una misma calle. Lo viví con Apaches, mi serie más dura. Y es interesante enseñar otros lugares de este país tan rico.
¿Qué exterior se resistió?
En La verdad, la casa de los McMahón; vimos unas 70 hasta decidirnos, y en Presunto, los astilleros.
¿Novedades en Allí abajo?
Un personaje, que es artesano; otro decorado para Jozé, y lavamos la cara al hospital, con más color.
¿Lo próximo?
Desaparecidos, para Telecinco, con decorados y exteriores en un edificio de la calle Alcalá, Madrid.
Te hubiera gustado hacer…
El cuento de la criada; cada posición de cámara es un cuadro y su arquitectura y luz impresionan.
Josep Rosell: "El pueblo hace de plató"
Con 42 años en el oficio, y un Goya por el filme El Orfanato (2007), Josep Rosell nos recibe en Tremp, Lérida, a la espera de que Antena 3 estrene su última serie, Matadero.
¿Qué exige tu oficio?
Gusto por el cine, tenacidad, mucha observación y documentación. El decorado, construido o localizado, es la radiografía del personaje.
¿Cómo llegaste a él?
Conocí en la mili al director Francesc Betriu y me empleó como meritorio en Furia española. Mi primera serie como director fue Los jinetes del Alba.
¿Y a la serie Matadero?
Diagonal TV, con quien hice Carlos, rey emperador, y el director Jordi Frades quisieron repetir conmigo para una serie rural en escenarios naturales. Y el pueblo madrileño Olmeda de las Fuentes hace de plató.
¿Y el matadero de cerdos?
Por sanidad está prohibido rodar en uno real. Se ha hecho en localizaciones.
¿Lo más dificultoso?
Dar con un tono que combine comedia y thriller, géneros contradictorios, ya que uno pide espacios alegres y el otro, oscuridad.
El Goya de El Orfanato está…
En mi estantería. El exterior de la casa se hizo en Asturias, y el interior, en plató.
¿Tu siguiente serie?
La japonesa Magi, en Salamanca, Valladolid y Cádiz.
Natalia Llopis: "He pateado Vallecas"
Fue pionera en sacar las series del plató con Doctor Mateo y ahora, con Estoy vivo, Natalia Llopis ha vuelto a Globomedia, donde debutó en 7 vidas (1999). Con el culo al aire o Vergüenza son también suyas.
Te formaste en…
Publicidad, como mi padre, a quien de niña acompañaba cuando rodaba spots. Luego estudié Interiorismo.
Ser director de arte exige…
Sensibilidad hacia lo artístico y el manejo de la tecnología (3D, fotografía…), para crear los escenarios donde se mueven los personajes.
¿Qué disfrutas del proceso?
¡Todo! El mes y medio previo dibujando el decorado, eligiendo materiales y después construyendo… ¡Y el rodaje! En cada capítulo de Estoy vivo hay nuevos decorados y localizaciones.
¡La historia es en Vallecas!
Nos hemos pateado el barrio buscando rincones curiosos. Para Márquez elegimos una casa señorial, y para el edificio fantasma, uno en una plaza espaciosa para el rodaje. Su interior es un puzle de varios lugares.
¡Pusiste Lastres en el mapa!
Para Doctor Mateo necesitábamos un pueblo pesquero, apostamos por Asturias y cogimos una furgoneta… Y tras ver otros, volvimos a él. Hubo más casualidades en
la elección de las casas.
¿Lugar que merecería serie?
Las Médulas, León. Es ideal para construir un mundo entero. ¡Me va lo fantástico!
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