El personaje de Mónica Robles en El señor de los cielos ha marcado un antes y un después no solo en la vida profesional de Fernanda Castillo sino también en su vida personal. Así lo ha declarado ante los micrófonos de Mezcal, donde ha confesado sentirse diferente.

"Creo que ahora me veo desde otro lugar, pero tiene que ver, no solamente que yo esté en otro lugar, sino que me veo, me valoro a mí misma desde otro lugar y trato de cumplir menos las expectativas de afuera y cumplir más las mías, que a veces son mucho más exigentes aún que las de afuera", confesaba la mexicana.

Para Castillo, esta etapa ha marcado un antes y un después gracias al cariño del público. "Me siento muy agradecida. Creo que estoy pasando un gran momento, que estoy teniendo muchas oportunidades de mostrarme al público, pero creo que lo estoy tomando así, como debe ser: con las manos bien firmes y tomando la rienda para hacer lo que más me gusta, que es contarles historias", expresa.

En este sentido, actualmente está inmersa en una nueva con la que quiere salir del personaje de la narconovela. Por ello, tomó la decisión de cambiar su imagen de forma radical tiñiéndose el pelo de cobrizo. "Yo fui la primera que dije que lo necesitaba, necesita ser radical el cambio para que la gente no vea a Mónica Robles, no vea a Fernanda Castillo, no vea a ningún otro personaje y vea a Roxana Rodiles".

Y parece que así lo ha conseguido. En su estreno, Enemigo íntimo lideró su franja de audiencia por encima de Caer en tentación. Consiguió aunar a 1.721.000 espectadores frente a la pantalla de la televisión y recabar buenas críticas.