Nunca imaginó que dejaría la ficción diaria de Antena 3 con un final tan sorpresivo, triste e inesperado, pero como intérprete le ha compensado. Esta semana, Marta Novoa cae a manos de Ortega, dejando destrozado a Durán. Mariona hace un balance muy positivo de su trabajo en la serie y del equipo que ha arropado a su personaje durante estos dos años.
¡Qué sorpresa la manera en que muere Marta Novoa!
La verdad es que sí. Nunca me planteé un final así para ella.
¿Qué pensaste cuando lo leíste?
Un poco de todo. Me encantó a nivel dramático, pero también sentí pena por tener que despedirme del personaje.
¿Hubieras preferido que se fuera de viaje o algo parecido para poder volver a la serie algún día?
En las novelas nunca se sabe. Puede pasar de todo.
Ortega se sale con la suya. ¿Cómo se grabó la escena?
Era la primera vez que ponían tiros de efectos especiales. Fue la última secuencia de una jornada larga, pero lo viví como una experiencia maravillosa y me encantó hacerla con Fernando.
¿Fue muy duro?
Rodamos todas las escenas el mismo día y todas requerían mucha intensidad emocional. Aunque fue agotador, el resto de los departamentos nos ayudaron en todo, como siempre, y el trabajo de equipo fue estupendo.
Dejas a Durán desolado. ¿Cómo ha sido tu relación con Víctor Clavijo?
Muy buena. Es un actor increíble y ha sido un placer trabajar a su lado. Hemos intentado crear una relación entre Marta y Durán que fuera coherente con el pasado de ambos personajes.
Después de dos temporadas, ¿qué sentimientos tienes?
Sinceramente, estos dos años se me han pasado volando. El recuerdo que me llevo es de haber trabajado como nunca, pero de sentirme muy bien acompañada y de haber aprendido mucho.
¿Lo mejor y lo peor?
Lo peor, el agotamiento de este tipo de trabajo, pero me ha compensado al ver los resultados.
¿Y qué proyectos tienes ahora?
Valorar los nuevos retos que puedan aparecer y dar un empujón a Cuddles BCN, la marca de accesorios y ropita para bebé que monté con mi madre. Me pasaré casi todo el verano cosiendo.
