Camila y Adriana encuentran el lugar donde Octavio guarda la droga que vende y, tras poner al corriente a Marisol, renuncian a su empleo en la farmacia. Justo cuando el hombre es detenido, aparece Virginia y él amenaza con vengarse. Pero la joven ya no le tiene miedo…

Marlene y Andy siguen intentando sabotear el negocio de Eva sin sospechar que, al mismo tiempo, Armando está convenciendo a cada uno de los clientes de su ex para que sigan trabajando con ella. Montes acaba contando a Evencio lo que está haciendo, pero este no puede evitar dudar de la repentina generosidad de su expatrón.

Cuando Adriana descubre que Camila sale con Andy su amistad se tambalea. Aunque la exconvicta insiste en que su novio se llama Antonio, Eva y su hija le demuestran que la han engañado y la joven, furiosa y decepcionada, promete vengarse.

Incapaces de ocultar sus sentimientos, Eva y Pablo se reconcilian pero su felicidad será fugaz. Betty empeora y ante el peligro que corre su vida y la de su hijo, los doctores aconsejan una cesárea de urgencia. Ella acepta con una condición: casarse con Contreras. Entre la espada y la pared y aun a riesgo de perder a su amada, el joven no tiene más remedio que acceder y pide a J. J. que lleve un notario al hospital.

Horas más tarde, la pareja se da el “sí, quiero” mientras Eva, rota de dolor, observa la escena desde la puerta de la habitación.

Federica recuerda dónde ocultó Sebastián los documentos en los que le cedía a ella sus bienes y Reinaldo seduce a Leila para entrar en su casa y conseguirlos.

Resignada a estar lejos de su amor, Eva va a conocer a Cecilia, la hija de Pablo y Betty, y promete a esta que entre ella y Contreras no volverá a suceder nada.

Rebeca escapa de sus guardianes cuando la trasladan a la cárcel de Wisconsin y se dirige a casa de Las Furias en busca de venganza. Ajenas al peligro que las acecha, las amigas celebran el cumpleaños de Bertha hasta que esta y Virgina salen un momento y la prófuga aprovecha para disparar, acabando con la vida de la nana de Eva.

Por otra parte, Marlene sigue perdiendo clientes y empieza a sospechar que alguien está pasando información a Soler.