Tras el testimonio de Cynthia, esta y Robert son condenados y Bobby los visita a ambos. Agradecido con su madre adoptiva por haber dicho la verdad, el muchacho la perdona, no así a Monteverde, que le suplica su intercesión para que lo cambien de celda.

En ese momento, Marlene y Andy se encuentran en la frontera de México esperando a los hombres que van a ayudarlos a cruzar a Estados Unidos, pero son traicionados por los sujetos que además intentan matarlos. Los hermanos huyen y se refugian en un hotel justo cuando en la televisión del establecimiento aparecen sus fotos en pantalla.

Avisados por el recepcionista, Pablo, Marcos y varios agentes se presentan en el lugar y, una vez más, los fugitivos escapan, aunque esta vez una de las balas de Contreras ha alcanzado a Andy dejándolo muy malherido. Pese a la gravedad de la situación, Marlene se niega a ir a un hospital ante la posibilidad de que los descubran y el muchacho no tarda en morir en sus brazos.

Marcos recibe los resultados de las pruebas que se le realizaron unos días atrás al cadáver encontrado y que demuestran que se trata de Elsa Ardiles. Con la mujer muerta, el detective y Augusto abren la carta que tienen en su poder, donde se confirma que Armando fue cómplice en los asesinatos de Carmen y Sofía. Sin perder tiempo, Fajardo se presenta en casa de Eva para arrestar a Montes, pero el hombre no se encuentra allí.

Mientras tanto, Marlene captura a Virginia y, utilizándola como cebo, se cita con Pablo para secuestrarlo a él también. Luego envía una fotografía de ambos a su enemiga con un inquietante mensaje: “Estamos en Mon Sol. Si quieres que sigan vivos, ven inmediatamente”.

Soler corre a la empresa, pero cuando Palacios le dispara, Contreras se interpone y es él quien recibe el disparo. La malvada mujer también dispara contra Armando, que aparece en ese momento y la asfixia hasta darla por muerta. Sin embargo, Marlene sigue viva y vuelve a apuntar a Eva, que está atendiendo a los dos heridos. Por suerte, Virginia reacciona con rapidez y acaba con la vida de la asesina. Paralelamente, aparece un cuerpo junto al mar y la policía certifica que se trata de Andrés Palacios. Trasladados los dos hombres al hospital, Ana comunica a Soler que Pablo está bien pero que el estado de Armando es crítico y es probable que no sobreviva.

Manteniendo la serenidad y asumiendo que quizás no le quede mucho tiempo, Montes comienza a llamar a sus seres queridos para despedirse y pedir perdón por el daño causado. Una vez que ha terminado, Marcos se presenta en su habitación. “Usted y yo vamos a mantener una conversación, pero cuando me vaya esa charla nunca habrá existido”, le dice misterioso. Poco después, en el pasillo se escucha una alarma que proviene del cuarto y algo más tarde Fajardo anuncia a Eva la muerte de Armando.

Meses después, todo ha regresado a la calma: las Furias, que han creado una fundación para ayudar a otras mujeres, incorporan a Marisol y a Ana María en el grupo; Adriana da a luz a dos preciosos niños y Soler y Pablo se convierten en marido y mujer en una preciosa ceremonia.

Mientras, muy lejos, Armando disfruta de una nueva vida y conoce a una mujer con quien vuelve a recuperar la ilusión.