Los asuntos financieros de la empresa Logatoys están en su peor momento y su dueño, Mauricio, ve la solución cuando conoce a Miranda, hija del rico empresario Fairbanks, y decide conquistarla.

Lejos de allí, Renée y Alejandro inician una relación, que va camino de acabar en boda. Sin embargo, el destino trunca ambas relaciones: segundos antes de que López-Garza dé el “sí, quiero”, una niña, que dice llamarse Anifer, irrumpe en el altar gritándole: “¡Eres mi papá!”. Al mismo tiempo, Renée abandona la iglesia, tras discutir con su prometido.

Entre tanto, Jorge y Dulce atraviesan una crisis pues ella le ha sido infiel. “Me voy”, asegura la abogada dejando a su marido con sus cuatro hijos. Al igual que el letrado, Vero y su esposo, Toño, que son padres de tres niños, trabajan en Logatoys y todos ven peligrar sus empleos.

Poco después de enviudar, Nerón inicia una relación con la joven Flor Ivonne, que pronto queda embarazada del jubilado. Cuando la modelo da a luz, aún no conoce a los hijos mayores de su pareja.“¿Vas a avisarles de que ha nacido su hermana o es un secreto?”, pregunta, viendo que él dilata el momento.

Días más tarde, Mauricio decide someterse a las pruebas de paternidad, ante la exigencia de Miranda para que se aclare la situación. La ternura de Anifer lo ha conquistado y, sea su progenitor o no, la acoge, aunque no duda en dejarla en un parque de atracciones para irse de viaje con su novia. A punto de coger el avión recibe la noticia de que el ADN de la niña es el suyo.

Durante la enfermedad de su madre, Renée ha pasado mucho tiempo con Lupe, su médico, que se ha enamorado de ella. Más tarde, la ingeniera descubre que este ha pagado los gastos del funeral. Sin embargo, en la vida de la joven se cruza Mauricio en el momento en que Anifer acaba de escapar, enfadada porque no la quieren, y la buscan juntos.

Cuando se quedan solos, la pequeña interroga al empresario: “¿Te gusta Renée?” No paras de hablar de ella”. Además, a través de un dibujo, Mauricio trata de recordar a la madre de la niña, sin éxito.

La bancarrota de la empresa es imparable tras la retirada de Fairbanks y después de que Mauricio descubra, cuando está a punto de vender Logatoys a Falcón, que se lo impide una cláusula en el testamento familiar. “Estoy arruinado”, piensa.

Mientras Jorge asume su situación de padre soltero y se lo comunica a sus hijos, Nerón rechaza a los suyos, que han puesto en duda su relación con Flor.“La niña y tú sois ahora mi única familia”, asegura.