Rahmi consigue escuchar a Mukaddes hablando con Salih y la echa de casa. Sin más opción, la mujer busca a su antiguo amor y se marcha con él a la playa aunque eso suponga no poder declarar en el juicio. El comienzo de los trámites de divorcio por parte de Meltem propicia que Turaner retire su apoyo económico a Resat. Con desesperación, el empresario ve cómo va sufriendo grandes pérdidas, que podrían llevarlo incluso a la bancarrota.

A su vez, Münir prepara con esmero la defensa de Selim y Erdogan y convence a Asu para que, a cambio de una generosa suma de dinero, testifique a su favor. En la cárcel, ambos jóvenes siguen padeciendo represalias y se impactan al ver que Vural será su nuevo compañero. “Ya no puede ser controlado en el hospital. Ha intentado huir en varias ocasiones”, informan. Mustafá visita el restaurante de Fatmagül y no duda en amenazarla: “Os tengo vigilados”.

La joven no sabe cómo reaccionar ante la numerosa presencia de clientes y solo una llamada de Telci logra sacarlo del lugar. Kadir tiene cada vez más complicidad con Ebe Nine y aprovecha una cena para abrir su corazón, recordando su soledad, la distancia con su difunta esposa y sus problemas con el alcohol.

La felicidad de Mukaddes no es completa ya que extraña a Murat y quiere regresar a Estambul. Cuando intenta hablar con él, un furioso Rahmi lo impide y la mujer se queja a Salih: “Esta situación no es justa. Deberíamos traer a nuestro hijo con nosotros”.

El encuentro con Mustafá ha dejado a Fatmagül muy inquieta y Kerim no tarda en percatarse. “No quería preocuparte. Ahora te necesito más que nunca”, declara ella después de que disfruten de una tarde en el cine. Los problemas no acaban para Mukaddes ya que descubre que está embarazada de nuevo. Yo no voy a hacerme cargo, así que la mejor opción es que abortes”, afirma Salih al enterarse. Sin embargo, ella no está muy convencida y se plantea volver a su casa.

Resat no olvida los actos de Turaner y pretende contraatacar con unos documentos que prueban varios delitos que cometió cuando era diputado. “Voy a destruirlo”, jura. Desconoce que Mustafá lo espía y se ha puesto en contacto con Meltem para advertirle. En un impulso, los jóvenes terminan besándose. Llega el cumpleaños de Fatmagül y Kerim le organiza una fiesta con amigos y familiares. En ella, la sorprende con un vestido de novia y una petición para que vuelvan a contraer nupcias. Todo es felicidad hasta que Mustafá hace entrega de su regalo: un espectáculo de fuegos artificiales.

Alagoz se va a Estados Unidos con su familia El día que Fatmagül tanto ha esperado llegó y Kerim, Vural, Erdogan y Selim se enfrentan al tribunal. Uno a uno, dan su versión y los tres últimos reiteran su inocencia. Durante el turno de los testigos, Ebe Nine y Emre declaran a favor de Fatmagül y Resat y Asu en contra. Cuando le toca a Mustafá, este niega su testimonio anterior y cuenta lo que realmente sucedió aquella noche.

Mukaddes, por su parte, intenta ingresar a la sala sin éxito y le revela a Rahmi que está embarazada. Pasadas unas horas, el juez deja en libertad a los acusados mientras se completa la investigación y los cita a un segundo juicio. Los Yasaran muestran su alegría y Selim comienza a planear su venganza contra Meltem, que ha viajado con su familia a EE. UU.

Esa misma noche, Kerim vuelve al lugar donde agredieron a Fatmagül y allí se encuentra con Vural. Atormentado, este le entrega una piedra y le suplica que lo mate, pero Ilgaz se niega y se marcha. Mustafá, que ha visto todo escondido detrás de un árbol, sale y empieza a gritar y golpear al joven. Namli no se defiende y, al caer sobre la piedra, fallece en el acto.