La policía acusa a Kerim del homicidio de Vural y lo detiene. Fatmagül y su familia le brinda su apoyo incondicional y todos deciden mudarse a la casa del abogado Kadir para estar más seguros. Aun así, no pueden evitar que Nalcali les siga.

También Asu sabe que Ilgaz no es culpable y se reúne con Mustafá para recopilar información sobre la muerte de Vural. Ambos tienen un acercamiento y retoman su relación sin saber que Meltem está de vuelta. Los días van pasando y la única alegría para Kerim en prisión es la visita de su esposa. Entre lágrimas, ambos se intercambian las cartas que se han escrito y terminan abrazándose pese a que está prohibido tener contacto.

A la salida, Fatmagül se encuentra con Halide y Emin, los padres de Mustafá, que se muestran muy arrepentidos por no haberla escuchado. “Todo lo que pasó me sirvió para darme cuenta de quién era la gente que me rodeaba”, responde la joven.

Rahmi acompaña a Mukaddes al hospital para la primera ecografía. Su felicidad es total cuando recibe el resultado de las pruebas de ADN y confirma que él es el padre de la criatura.

La investigación por la muerte de Vural continúa su curso y se hallan nuevas huellas en el lugar del suceso. Además, Asu recuerda una información fundamental y está dispuesta a declarar sin saber que está más cerca del culpable de lo que cree. “Yo vi a Kerim marcharse de allí y Vural todavía estaba vivo”, asegura.

Selim Yasaran confronta a Meltem Yasaran ordena a uno de sus secuaces que vigile a Kerim y pide ayuda a Münir para esclarecer el asesinato de Namli. Por casualidad, Leman y Semsi oyen una de sus conversaciones y dan por hecho que es culpable. “Voy a vengar a mi hijo. ¡Te mataré con mis propias manos!”, grita él.

Por su parte, Selim aprovecha el regreso de Meltem para confrontarla e incluso llega a golpearla cuando ella reconoce que estuvo con Mustafá. En prisión, Kerim queda impactado al encontrarse con su padre después de tantos años. “Para mí, estás muerto desde que era niño”, asegura con rabia al recordar tanto el abandono que sufrió como el suicidio de su madre y se marcha sin cruzar palabra.

No es el único inconveniente, ya que descubre que los Yasaran tienen un espía. Finalmente, Asu acude a declarar para descontento de Mustafá. En un intento por mantenerla controlada, él le asegura que es el amor de su vida y le propone matrimonio, pero ella duda.

Esa misma tarde, atormentado por la culpa visita la tumba de Vural y la chica, que lo sigue, descubre la verdad. “Fue un accidente. Yo no quería… Estábamos discutiendo y él se dio un golpe con una piedra al caer”, explica Nalcali entre lágrimas a la vez que le suplica que no eche por la borda su futuro.

Lejos de allí, Fahrettin se reúne con Ebe Nine y le pide que le entregue a Kerim la carta que le dejó su madre antes de morir: “Tú decidiste alejarme de mi hijo. Por eso, me rechaza”. Y añade: “Ya es hora de que sepa la verdad”.

Mukaddes no tarda en enterarse y se cuela en la habitación de la señora en busca del escrito.Sin embargo, es descubierta y cuando trata de escapar, da un traspiés y cae por las escaleras. De inmediato, es trasladada al hospital y, por suerte, los médicos logran salvar la vida de la niña que espera. Kerim también tiene motivos para alegrarse ya que fijan la fecha de su juicio.