Mau no puede contener los celos que siente por Eugenio y tiene una discusión con Valentina en la playa. De regreso a casa, la joven cuenta lo sucedido a Raquel y esta hace una inesperada revelación: “Es normal su comportamiento. Está enamorado de ti”. Sin embargo, Olmedo no le da importancia a causa de la enfermedad que padece la viuda de Fonseca.

Eugenio decide relajarse tomando el sol en la terraza del Mauva, pero desafortunadamente al quitarse la ropa se le cae la cartera delante de Leonel, dejando al descubierto su verdadera identidad: René Murat. Lejos de delatarlo, Madrigal le propone unir fuerzas para destruir a Gonzalo: “Vamos a vengarnos de cada una de las humillaciones que nos hizo sufrir y a arrebatarle sus bienes”.

Ajeno a esto, el empresario celebra que Valentina le haya pedido perdón por todo el rencor que le guardó durante años y quiera comenzar su relación desde cero. Para mayor alegría, la chica decide quedarse en Cancún y no regresar a Los Ángeles.

Quien sí planea irse lejos con su familia es Beto ya que teme que Tobías o Nuria descubran la verdad. Desconcertada, Chelo pide ayuda a Mau y cuando va a hablar con su empleado descubre el por qué de su decisión. “Tobías no puede descubrir que es hijo de Nuria. Su vida va a cambiar para peor y mi madre puede ir a la cárcel”, dice angustiado.

Mientras Ileana trata de seducir al patriarca de los Murat por orden de Leonel, Eugenio se interesa en conocer a Carolina con el pretexto de dar clases de buceo.

Valentina decide dar a Adriana parte de la herencia que le dejó Adrián para que no sufra carencias. Sin embargo, ella se gasta el dinero en comprar una identificación falsa para poder visitar a su tía en la cárcel. Además, planea viajar con ella a España en cuanto sea posible y Tobías comienza a ayudarla con la promesa de llevarlo también a él. Fabricio se muere de celos al ver el acercamiento entre los jóvenes y confronta a su amigo.

Por su parte, Gonzalo se entera de todos los perversos planes que Nuria realizó en contra de Mau y Valentina cuando eran unos niños y toma una decisión radical: “Quiero que sepas que estás fuera de mi testamento y que no recibirás un solo centavo”.