El plan de Bruno y Marcelo ha funcionado a la perfección y Beatriz ha sido encarcelada. Juan Andrés está seguro de que Egaña se halla detrás. Dispuesto a demostrarlo, el abogado habla con Federica: “Tienes que pagar la fianza de Beltrán antes de que seamos nosotros quienes acabemos presos”.

La mujer decide vender sus joyas pero cuando va cogerlas han desaparecido y acusa a Napoleón. Aunque en realidad sí las ha robado y las ha ocultado en el dormitorio de Hortensia, el chico finge ser inocente y echa la culpa al personal de servicio.

Tras una pelea con Juan Andrés a causa de la mujer a quien ambos aman, Luis David se emborracha. “No he sido capaz de contar a mi hermano que Bea está esperando un hijo suyo”, confiesa a Liliana más tarde.

Rocío da con las joyas que todos andan buscando y, pese a las críticas de su madre y su hermano, decide devolvérselas a Federica. Lo que esta no sabe es que su dinero no bastará para pagar la fianza de Beatriz, pues la chica se ha defendido del ataque de una reclusa y ahora la acusan de intento de homicidio.

Silvestre encuentra a Luis David inconsciente y una ambulancia lo lleva al hospital. Con el joven debatiéndose entre la vida y la muerte, Elia es testigo de la desesperación de Liliana y se da cuenta de que lo ama de verdad.

Solo algunos días después, Montalvo empieza a reaccionar y en un descuido de los médicos escapa del centro con la ayuda de Chapita. Pero la suerte no parece estar de su parte y al poco se ve sorprendido por una riada que comienza a llevarse lo que encuentra a su paso…